Queridos hermanos:
¡Que Nuestro Señor Jesús sople sobre todos los corazones!
Como otros años, queremos invitarlos para que seamos uno en Nuestro
Señor Jesucristo y preparemos en toda la Iglesia la Gran Fiesta de
Pentecostés.
Que este Hermosísimo Día no pase desapercibido, sino que junto a María,
Nuestra Madre Santísima, esperemos la llegada del Espíritu Santo como el
Señor nos lo ha pedido: unidos y orando…
Oremos y alabemos con María a Jesús Sacramentado, para que vivamos en
nuestro corazón la llegada del Espíritu de Dios, la llegada del Dulce Huésped del alma que renueva nuestros corazones y nuestras fuerzas para ser semillas del Reino en esta tierra.
Contagiemos con gozo esta Preciosa Celebración.
Les acompañamos nuestra propuesta y recemos todos juntos:
¡Ven Espíritu Santo ven,
por medio de la poderosa intercesión
del Corazón Inmaculado de María,
Tu amadísima Esposa, ven!
Llega el Santo Viento del Espíritu Santo, sumate a la fiesta de Pentecostés!!