A los Misioneros de Nuestra Señora del Cielo, en
oportunidad del 21 aniversario de nuestra fundación.
Los saluda el Obispo Pedro.
Hoy quiero estar junto a ustedes como ya he estado en otros momentos de su vida, desde que llegué a esta Diócesis, para celebrar estos 21 años.
Nuestra Señora del Cielo nos guía hacia Jesús, nos enseña cómo conocer a Jesús, y nos pide escucharlo y seguirlo. Y cuando uno habla de Jesús, habla de Su Iglesia. la lglesia continuadora de la obra misionera del Salvador, de Jesús.
De este modo hoy celebramos con este grupo que tiene como propósito principal justamente el de ser misioneros. Todos los católicos tenemos que ser misioneros, y es por eso que está muy bien todo esto.
Tenemos que hacerlo todo siempre unidos a la Iglesia, buscando la comunidad. No podemos ser católicos si no buscamos la comunidad que nos toca en cada lugar, en cada barrio, en cada zona donde nos lleve la vida.
Yo puedo dar fe que ustedes en esta Diócesis han hecho un trabajo comunitario en la Parroquia donde están, donde está el Santuario ahora. Y es por eso que realmente les agradezco mucho, y les pido seguir. ¡Háganse conocer!
Siempre que un grupo está en sus inicios tiene que buscar con sencillez y humildad hacerse conocer y aceptar. a veces, que algunos no los comprenden. Eso es parte de la vida, nos pasa a todos, y también a su Obispo le pasa.
Por eso hoy me uno mucho a ustedes en esta fiesta, que será a distancia porque no podemos celebrar la Misa en estos tiempos de pandemia. En realidad si celebramos, pero no podemos participar en los Sacramentos unidos como quisiéramos, en comunidad.
Porque la Misión es consecuencia de los Sacramentos y la Misión se sigue alimentando de los Sacramentos. Los Sacramentos se siguen celebrando en estos tiempos, aunque no podemos participar todos.
Los bendigo mucho y les doy todo mi apoyo y cariño.
Que María del Cielo nos proteja a todos y nos cuide.
La bendición de Dios, del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, esté siempre con ustedes.
Amén
Campana, 11 de setiembre de 2020